Daenerys, John Snow, dragones, el muro, los caminantes blancos, el invierno y el Trono de Hierro… La hayas visto o no, seguro que ya sabes que nos referimos a Juego de Tronos (Game of Thrones), la novela de George R.R. Martin, adaptada con apabullante éxito a la televisión. Pues bien, si estás en Barcelona y no puedes vivir sin sentarte en el codiciado Trono de Hierro, podrás hacer realidad ese deseo en la exposición Juego de Tronos.
GAME OF THRONES: The Touring Exhibition es el nombre oficial de esta exposición que ha tenido su estreno mundial en Barcelona y que promete llevar a los visitantes al mismísimo Poniente. De la mano de HBO España y Vodafone, el día de la inauguración nos acompañaron un irreconocible Jaqen H’ghar (Tom Wlaschiha), mentor de Arya Stark y sumo sacerdote de la Casa de Blanco y Negro y Meryn Trant (Ian Beattie), miembro de la Guardia Real y uno de los nombres principales nombres en la lista de Arya Stark.
Y vas a trasladarte a los Siete Reinos gracias a los decorados y las piezas de atrezo y vestuarios originales de la serie: ves los trajes e inmediatamente visualizas al personaje los viste. Además gracias a la tecnología que acompaña a la exposición. Y es que la experiencia del visitante moviéndose por las diferentes zonas temáticas es mucho más inmersiva e interactiva.
La exposición se divide en 10 decorados envolventes, interactivos y con contenido multimedia que recorren la historia de la serie “Juego de Tronos”. Los visitantes tendrán la posibilidad de experimentar la vivencia de los paisajes invernales del Norte y la arbolada senda del Camino Real; ver una guarnición de guerreros Inmaculados y los icónicos trajes de la Casa Targaryen; entrar en la Casa de Blanco y Negro; y explorar el Castillo Negro, hogar de la Guardia de la Noche. Y por último, llegar al Trono de Hierro, donde poder sentarte y sentir el poder de los Siete Reinos.
Todo ellos muy impactantes aunque sin duda la Casa de Blanco y Negro, que es uno de los más inquietantes de la serie y en la exposición, no va a dejar indiferente a nadie. ¿Por qué? No queremos hacerte un spoiler, pero te diremos que la tecnología hace posible que la cara de los visitantes acabe entre la colección de los Hombres sin Rostro. Tan sólo tienes que posar delante de una tablet y como por arte de magia tu cara será una más entre los nichos que llenan las columnas de la Sala de los Rostros.
Ah, si te ha gustado mucho, luego la podrás comprar como foto recuerdo (con posibilidad de descarga online). Otras fotos que podrás hacerte: a lomos de un dragón o acariciando su nariz (estas son de pago, croma key mediante) y una muy ingeniosa, gracias a un juego de espejos, colgando del muro con una simple cuerda. También un fantástico cráneo de Dragón que hará las delicias de los fans de Kaleeshi.
Entre otras cosas podrás sentirte como una salvaje, intentado escalar el muro, de forma virtual claro; o sentirte Ned Stark, a punto de cortar una cabeza, o Arya empuñando su famosa Aguja (Needle, para la versión original), eso sí, sólo para posar para una foto. Y es que estamos seguras de que no podrás resistirte a llenar el móvil con miles de selfies.
Por si nos falla la memoria, las pantallas colocadas por todas las zonas temáticas nos ayudarán a recordar las escenas protagonizadas por todos los elementos originales de la serie distribuidas por parte del Museo. Y claro, a meternos aún más en el universo de Juego de Tronos que reinará, sin duda, en el frío barcelonés.
Resumiendo, más de 1.000 metros cuadrados que ofrecen la oportunidad de adentrarse en el mundo de Poniente y Essos y experimentar la grandiosidad, el universo artístico y la emoción de la exitosa serie de HBO. Un gran trabajo de a productora nortemaricana GES y las promotoras europeas Sold Out y Encore.
No me olvido de la tienda oficial en la que encontraremos diversos productos de merchandising, desde las esperadas camisetas pasando por carcasas para móviles hasta huevos de dragón y moldes para pasteles. El invierno ha llegado a Barcelona y tú, ¿vas a perdértelo? ¡Tienes hasta el 7 de enero de 2018 para disfrutarla en las Drassanes!
