https://www.apple.com/newsroom/2017/09/the-future-is-here-iphone-x/?videoid=1505155509545Si hasta ahora el dedo o el trazo hacía activar tu teléfono, Apple acaba de lanzar una nueva frontera: la cara. El nuevo iPhone X, el espectacular móvil todo pantalla que la compañía que fundó Steve Jobs ha presentado este martes, se activa con solo ver al usuario gracias a una increíble tecnología de reconocimiento facial.
El móvil, que se lanzará en EEUU en noviembre, cambia también la forma de relacionarse con el terminal. Ahora ya no se carga con cable sino con una plataforma, como hizo la última Palm que el ex Apple Jon Rubinstein, uno de los padres del iPod, presentó en el CES del 2009. Tampoco tiene auriculares con entrada, porque el iPhone 7 ya lanzó los Airbud, los auriculares inalámbricos de la compañía.
El décimo aniversario del móvil y el estreno del teatro de nuevo campus de Apple, un espectacular edificio en forma de círculo llamado Apple Park, no defraudó a nadie. Pese al ‘chasco’ inicial de un iPhone 8 que incorpora las mejoras de software del nuevo sistema operativo, pero que exteriormente es idéntico al anterior iPhone 7, el nuevo iPhone X sorprendió a la parroquia, pese a que ya se habían filtrado muchos de sus detalles.
Cerrar las apps
El nuevo móvil es todo pantalla, suprime el botón de inicio y con ello, cambia la forma de cerrar las aplicaciones. Ahora solo hay que enviar la pantalla hacia arriba –de nuevo la sombra de la Palm de Rubinstein–, el mismo gesto con el que ahora se cerraban las apps cuando el móvil comenzaba a colapsarse.
Y aunque no aprovecha los bordes de su pantalla de 5,8 pulgadas (el tamaño del iPhone 7 Plus) de forma especial como hace el Samsung Galaxy 8, sí que convierte la cámara frontal en un control más al conseguir que al reconocer un rostro se active el teléfono y además se introduzca como medida de seguridad en los pagos con Apple Pay. La nueva tendencia biométrica que está llamada a revolucionar la tecnología.
El reconocimiento de cara es, según Apple, extraordinariamente preciso y es capaz de ‘entender’ que la cara es la misma independientemente del peinado, el vello facial, las gafas o la ropa. Incluso, afirmaron en la presentación, de las condiciones de luz. Vamos, un móvil que hasta te reconoce cuando te levantas de la cama… Lo cual no es baladí porque según muchos estudios lo primero que hacemos cuando nos levantamos es mirar el móvil.
Apple lleva años ensayando la tecnología de reconocimiento de caras, como puede ver cualquier usuario de sus programas de fotos. Y parece ser que ahora ya ha encontrado la fórmula mágica gracias a 30.000 puntos infrarrojos analizados con software de redes neuronales (es decir, inteligencia artificial en estado puro).
Por lo demás, el iPhone X, que costará 999 dólares en EEUU (1.159 euros la versión más barata en España) aprovecha también la fiebre de los emojis para crear emojis parlantes que se sincronizan con la cara del usuario en Snapchat, y para enviar animaciones en los mensajes con iMessage (en Whatsapp, de momento, nada). Se llaman Animoji y están llamados a ser uno de los puntos más atractivos del teléfono.
Tanta tecnología de reconocimiento exige, obviamente, una cámara potente. Aquí es de 12 megapíxeles dual la trasera, con muchas mejoras sobre todo para la grabación de vídeo y la realidad aumentada, una de las grandes apuestas de Apple para los juegos y las apps.
La cámara delantera, de la que no se ha especificado la resolución, también es mucho más potente sobre todo en la captación de luz. La pantalla SuperRetina es, según Apple, una de las mejores que ha lanzado la compañía y una revolución para un móvil que para soportar todo esto lleva un procesador de seis núcleos. De momento, de batería ni una palabra.
El lanzamiento en España, que esta vez no se queda en segunda fila, será el 3 de noviembre.