Instagram ya está asentado. A Snapchat le han quitado parte del atractivo desde que Instagram admite vídeos e Stories, pero a las dos les ha salido un tercer competidor: Musical.ly, la app que arrasa entre los adolescentes. En EEUU, según la propia compañía, la usan ya la mitad de los adolescentes.
Musical.ly es una red social en torno a los vídeos musicales. Se trata de grabar tu propio videoclip a partir de una base de canciones, que puede ser de la tienda o de tu propia música. Se puede hacer playback, o lipdub o lo que se te ocurra, usando la cámara del móvil o la tablet (hay versiones para iPhone, Android o Amazon) en plan selfie y con herramientas como timelapse para grabar lento y que se reproduzca rápido, o filtros. la duración máxima son 15 segundos, que se irán reproduciendo en bucle como si fueran vídeos de Vine.
La red ha captado no solo a millones de usuarios que suben sus vídeos (a los que llaman «musers») sino a numerosos artistas. Shakira, Bruno Mars, Ariana Grande, Selena Gómez o hasta Paris Hilton tienen ya cuenta, y ya ha creado su propio star system, como Jacob Sartoirius, el cantante de Sweatshirt, que comenzó en Musical.ly y ya es el 9º artista más buscado en Google.
Porque Musical.ly comenzó en el 2014 de la mano de Alex Zhu, un diseñador de origen asiático de San Francisco, que vio claramente su criatura tras fracasar su intento de crear una app de educación. Su formación en usabilidad le ha ayudado a crear una app muy fácil de usar, bastante intuitiva en el diseño y que tiene algunas de las ventajas de otras redes sociales: los likes de Instagram, los filtros divertidos de Snapchat, la música de Spotify y el vídeo de Youtube, combinado con la agilidad de Vine.
Incluso ha fichado a la estrella de Vine, el hombre de los vídeos imposibles, Zack King, como embajador de la marca.
Zhu explica que tuvo su idea viendo a un grupo de adolescentes que se tomaban selfies y se grababan vídeo que enviaban a redes sociales mientras escuchaban música y penso que por qué no juntar todas esas cosas. Es más, por qué no ir juntando gente.
Una de las partes más divertidas de Musical.ly es que junta a usuarios que hayan grabado la misma canción, los ordena por etiquetas y permite crear playlists. O enviar preguntas y mensajes por vídeo, o compartirlos en otras redes sociales, como Instagram, Facebook, Twitter, Whatsapp, Line o correo electrónico.
Permite además invitar a los amigos a hacer duetos con la canción de un vídeo que te guste, lo que hace que la app elabore listas con los temas más repetidos. Se pueden seguir usuarios, o notificar que se está en directo. Para ello usan otra app, Live.ly, pero que está conectada con Musical.ly.
Y lo más sorprendente es la creatividad de los ‘musers’, algunos muy, muy jóvenes. Por si quedaba alguna duda de que esta era una app pensada para adolescentes.