Cuando hay peques en casa o nos encanta tenerlo todo bien clasificado, lo mejor es tener una etiquetadora fácil a mano que nos ayude en la tarea. En el mercado existen muchos modelos y una de los últimas en aparecer es la Brother P-Touch H100. Una rotuladora electrónica pequeña y manejable, útil para la oficina o para casa y que viene en dos colores diferentes, rosa y azul celeste, para que podamos elegir el que más nos guste y evitar los aburridos blancos y negros. Vanessa Herrero, asidua lectora de Gadwoman, mamá de dos niños y dueña de Las Tartas de Gretel, pastelería de repostería creativa, ha probado esta etiquetadora para nosotras y éstas han sido sus impresiones.
«Para empezar, aunque nunca hayamos utilizado uno de estos gadgets, no te quepa duda que se hace de forma muy intuitiva. Eso sí, olvídate de las instrucciones escritas porque sólo contaras con unos cuantos resúmenes que ayudan a utilizarla pero sin entrar en grandes detalles. En cuanto al tamaño, la Brother P-Touch H100 no es muy grande y pesa menos de 400 gramos y además se adapta bastante bien a la mano por lo que aún es más fácil de manejar. Las teclas son ergonómicas y están separadas entre teclas de función (arriba), números (en medio) y letras (abajo) para evitar confusiones.
«Una pequeña pantalla LCD nos sirve para ver cómo va quedando el texto que luego vamos a imprimir. La velocidad de impresión es de 20 mm/seg así que hay que invertir poco tiempo. Funciona con 6 pilas AAA, así que no hay que olvidarse de tener siempre a mano cuando vayamos a utilizar la etiquetadora.
«Como la mayoría de etiquetadoras funciona con unos cartuchos de cinta que además son muy fáciles de cambiar y que se pueden encontrar en cualquier papelería o grandes superficies. Tampoco son muy caros así que al final también es un ahorro comparado con comprar etiquetas online o las típicas cintas de la mercería que hay que acabar cosiendo. En este sentido hay bastantes posibilidades, desde los específicos para ropa que sólo se tienen que planchar en la prenda que necesitemos una vez impreso con la etiquetadora hasta las etiquetas laminadas que resisten al estropajo y al congelador. Como no, también hay de diferentes colores.
«Una de las cosas que más me gustó de esta etiquetadora fácil es la gran cantidad de opciones de decoración, marco o de tamaño y tipo de letra. A la hora de crear tu etiqueta se puede elegir entre un montón de posibilidades, como poner negritas, cursivas o incluso combinarlas y también se puede dividir en dos líneas. Además, tiene algunas plantillas predeterminadas en las que escribir el texto y colocar algunos dibujos de la temática que hemos elegido, por si no nos viene la inspiración en ese momento.
«En definitiva, el proceso para usar la etiquetadora fácil Brother P-Touch H100 es muy sencillo. Sólo hay que colocar el rollo de etiquetas que necesitas en ese momento, elegir el texto, seleccionar un diseño y apretar imprimir. Una vez sale la etiqueta, es fácil de cortar ya que el lateral viene perforado para que no se rompa o se estropee. El último paso es pegarla en los libros de los peques, los tupper de la cocina o donde se nos ocurra», comenta Vanessa Herrero. Además de para uso doméstico y relacionado con los niños, la cofundadora de Las Tartas de Gretel la ha usado en su pastelería, imprimiendo las etiquetas para las cajas para clasificar los cortadores de galletas.
Su precio también es una ventaja y es que cuesta unos 23 euros.