Qué hacer si te estafan con llamadas a un 803, 806 o 905

Las llamadas a números de tarificación adicional, como 803, 806, 807 o 905, te pueden dar un serio disgusto en tu factura telefónica si no te has parado a pensar que por cada minuto que hables vas a pagar al menos 1 euro, IVA aparte. Y el tema es muy grave porque la mayoría de las veces ni siquiera te das cuenta del tipo de número al que llamas, sobre todo si encima te han instalado una app que puede hacer estafas con llamadas sin que te enteres.

Vamos por partes. Los números de tarificación adicional están pensados para dar determinados servicios a través del teléfono de modo que los proveedores puedan cobrar este servicio. Es el caso del porno telefónico que engloba el 803; los agoreros del tarot a través del 806 o los servicios de médicos o abogados a través de 807. Son servicios muy fáciles de contratar (vamos, que lo puede hacer cualquiera), excepto los 807, que requieren que el profesional demuestre su capacitación. Los 905 están pensados para los concursos telefónicos.

Este tipo de llamadas tienen una limitación de hasta 30 minutos. Es decir, se corta. Pero ni por esas esta limitación ha logrado que haya usuarios a quienes «han hecho» llamar a este tipo de números. Algunos llaman más de una vez por seguir la conversación, que en ocasiones se ha originado a partir de un intento de engaño de un desconocido.

Pero si ya ha pasado, ¿qué se puede hacer?

1. Buscar la factura y pedir el detalle de los números. Si vas a denunciar, primero hay que saber a quién.
2. Abonar a la compañía la parte de la factura con la que estás de acuerdo y aislar la partida que piensas recurrir, incluyendo el IVA.
3. Escribir a la compañía telefónica explicando nuestra posición, y sobre todo por que no estamos de acuerdo con la factura. Esperar la respuesta.
4. Denunciar ante la oficina de consumo municipal o regional aportando la carta enviada a la compañía telefónica y su respuesta, si la hubiera. En ocasiones, la operadora remite a la persona que ha ofrecido la llamada discutida, y si esta no responde, entonces da por defecto la razón al reclamante.
5. Denunciar ante la Oficina del usuario de las telecomunicaciones, la supuesta estafa para intentar forzar que se retire el número a la persona que lo utiliza para engañar.

A partir de ahí, o hay que armarse de paciencia o hay que ir pensando en acudir a los tribunales para evitar que el delicuente se quede con TU teléfono.