Ver a una vicepresidenta del Congreso de los Diputados, en funciones de presidenta, jugando con la tableta mientras habla el presidente del Gobierno en el debate sobre el estado de la nación ha sido una imagen que ha avergonzado a muchos. Y que reabre el debate sobre hasta dónde estamos enganchados con los juegos de móvil.
Celia Villalobos, exministra y diputada del PP, pasó el rato de la comparecencia de Mariano Rajoy dándole a la pantalla en un movimiento que poco parecía el repaso de unos apuntes, la toma de notas o el análisis del impacto de lo que estaba sucediendo en las redes sociales, por citar tres ejemplos en los que alguien criticado por su acción hubiera podido desdecirse sin demasiados problemas.
Pero este miércoles, el programa de El Intermedio de La Sexta, analizó las imágenes que ya había reproducido toda la prensa y descubrió que, contrariamente a lo que se había atribuido, Villalobos no jugaba al Candy Crash, sino a Frozen, un juego muy similar pero con la princesa Elsa de protagonista, para Android, iPhone y iPad.
¿Y qué tiene Frozen? Pues que es igual de adictivo que el juego de los caramelos, pero aquí con bloques de hielo y escarcha.
Frozen sigue un esquema casi calcado de su precursor, el más exitoso de los llamados juegos de joyas (Jewel Games), que funcionan a base de ir haciendo emparejamientos de colores similares en un tablero o una pantalla.
El juego de Disney también permite ir saltando niveles a base de realizar compras o ganando objetos que luego puedes intercambiar, y por suerte para las diputadas adictas, al cabo de unos minutos de ir perdiendo, te echa y te deja un juego determinado sin jugar. Si en Candy Crush llegaba a ser un día entero en la versión gratuita, aquí solo llega a media hora, como máximo.
Por lo demás, es más sencillo, porque está pensado para adolescentes, muestra poderes ocultos y tiene escenarios paralelos que son casi iguales. Va aumentando la dificultad gradualmente, aunque ya por la mitad de la propuesta, los niveles se hacen extraordinariamente repetitivos.
Como quiera que sea, no es Villalobos la única enganchada. La app suma millones de descargas en todo el mundo y está entre las más solicitadas del Apple Store.
