Parece que sí, que al final vendrá el invierno y las lluvias, y llegarán por fin esas tardes en las que apetece quedarse en casa debajo de la manta. Y claro, caldear la casa. Si no tienes un sistema de calefacción centralizado, tendrás que recurrir a un radiador o un calefactor. Y la verdad, bonitos no son.
Si tienes una casa decorada con estilo moderno y quieres algo con glamour, los de Dyson tienen una línea de calefactores de auténtico diseño, que además sirven para frío y calor.
El AMO5 Dyson Hot + cool es algo especial. Para empezar, se controla con un mando a distancia. que es un ejercicio de diseño. Apenas seis botones que lo hacen todo: encienden, rotan, pasan de frío a calor y aumentan o disminuyen la intensidad.
El calefactor lo pones donde quieras en la habitación, aunque mejor en el suelo porque proyecta el aire creando una especia de amplificación, y calienta un espacio grande en un plis, por lo que es perfecto para un salón o una habitación espaciosa. Si tu baño es pequeño, no necesitas ni cinco minutos. Y si tienes la casa bien aislada, dura un buen rato.
Se le puede graduar la temperatura y ponerlo a una fija, aunque echamos de menos un termostato que permite que vaya renovándose la intensidad de modo automático.
Sí nos gusta, en cambio, que se puede inclinar tocándolo con un dedo y que es rotatorio en unos 45 grados para hacer llegar el aire a todas partes. Pero también no solo rota, sino que se inclina sobre su base.
Pasa del frío al calor bajando la temperatura. Como calienta el aire que le pasa o lo enfría, si estás en calefacción y necesitas refrescar tienes que bajar la temperatura a cero para que pase a frío, y a medida que lo vas subiendo pasa de frío a calor.
Como la mayoría de los calefactores hace ruido. No atronador, pero no lo pongas cerca de la tele porque resultará un poco molesto. Pero hace más cuando estás en calor que en frío, donde apenas se nota.
Otro punto a destacar es que aunque expulsa aire caliente, si pones la mano cerca no quema. Incluso la puedes poner dentro de la anilla, lo que si tienes niños es una garantía. Y también mantiene las resistencias alejadas del polvo de modo que, aunque esté sucio, no tienes esa desagradable olor a polvo quemado que suelen acoger los calefactores. Aquí la resistencia ni la ves.
Otro mecanismo de seguridad es que si se cae al suelo, se apaga solo.
Para que veas la potencia, mira el vídeo que hicieron los ingenieros de Dyson. Nos ha encantado, pero mejor que no intentes ponerle una bolsa de plástico encima.