La idea de contar con un escáner de mano me parecía muy atractiva pues cuento con un equipo miltifunción equipado con escáner pero encenderlo solo para escáner un documento muchas veces da pereza. Se me antojaba que tener un escáner portátil iba a simplificar la tarea de escanear documentos como recortes, tarjetas, revistas pero también otros materiales como tejidos. Por eso me interesó mucho probar el MobileOffice H100 de Plustek, con forma y tamaño de plancha del pelo (por decir algo muy visual) y manejable con una sola mano, del que os hablamos hace unos meses. El escáner es ligero puesto que no lleva batería ni tarjetas de memoria y se conecta directamente al ordenador mediante un cable USB.
Lo primero de todo es instalar los drivers y los programas necesarios para utilizarlo, a través del CD que viene. Después recomiendo descargarse el manual y leérselo porque el software no es intuitivo y el dispositivo no tiene más que un botón. Pero antes de usarlo hay que realizar algunas misiones como calibrarlo y formarse como usuario.
Calibrarlo es sencillo, una vez has encontrada la opción pertinente: simplemente se coloca sobre una hoja blanca que viene incluida en la caja para que haga balance de blancos.
La formación es necesaria pues al escáner de mano de Plustek hay que pillarle el punto; esto es, la velocidad a la que deslizas el escáner sobre el documento tiene que ser constante y ni muy rápida ni muy lenta. Es aconsejable dedicarle unos 5-10 minutos a este apartado. Así se consigue averiguar la velocidad más adecuada sin necesidad de hacerlo mediante el método prueba-error con documentos reales.
Una vez cumplidas estas dos misiones ya se puede iniciar el proceso de escaneo con bastante seguridad. Para ello tienes que abrir el programa iScan y seleccionar el sentido y la orientación tanto del texto como del escaneo: vertical u horizontal, derecha o izquierda. También hay que seleccionar la mano con la que se escanea. Otros ajustes que tiene son el modo – color, texto y escala de grises- la resolución (hasta 600 ppp), el brillo, el contraste y la gama (el gris medio a utilizar).
A pesar de ser sencillo el dispositivo – como he comentado no tiene más que un botón que lo activa y desactiva- para usarlo de manera satisfactoria hay que practicar. Porque al escanearse a mano alzada los resultados óptimos van en función de la destreza del usuario.
Por eso se agradece mucho poder ver en tiempo real en la pantalla del ordenador lo que estás escaneando y con la lupa que ofrece el programa iScan se puede mirar con detalle una determinada zona del documento. Así se comprueba si el escaneado ha sido correcto y por ejemplo, los textos son legibles. Conseguir escanear el primer documento – un artículo de una revista con texto y fotos a color- me ha supuesto varios intentos. Los escaneos posteriores ha sido rápidos y sin incidencias. La calidad de los mismos es bastante buena.
Además de documentos, he probado a escanear tejidos: lo he podido hacer de una manera sencilla, simplemente deslizando el escáner de mano por encima de la tela y el resultado ha sido muy preciso. Todo ello con la pieza de tela encima de la mesa, sin grandes preparativos especiales.
¿Para qué puedo necesitar un escáner portátil? Si no tienes un escáner en casa este dispositivo es una buena opción por ejemplo por temas de espacio. Es tan pequeño que cabe en un cajón. Otra ventaja es que es portátil: te lo puedes llevar a la biblioteca si necesitas escanear documentos o a casa de un amigo para escanear fotos, por ejemplo.
La calidad quizás no sea tan alta como la del escáner del equipo multifunción que tengo pues el componente manual juega en contra, pero para muchos escaneos de artículos y revistas o de documentos firmados no hace falta un acabado fotográfico.
En este sentido, el MobileOffice H100 de Plustek es más preciso que las cámaras de los móviles: hacer una foto a un texto no implica que este luego va a ser legible. Más de una vez he hecho fotos a artículos y luego al ampliar me he encontrado con que las letras estaban borrosas. Por supuesto es una gran opción si quieres escanear otro tipo de materiales como tejidos, cartones, pósters, etc que serían más complicados o imposibles de escanear en uno de sobremesa.
Una vez superado satisfactoriamente el periodo de aprendizaje, los resultados serán buenos aunque, y esta sería la principal pega, el componente manual siempre deja un pequeño margen a una imperfección más que aceptable.
Si fuera a viajar con él echaría en falta una funda o estuche para conservarlo en perfectas condiciones.