¿La tele que te compraste hace unos años es de 32 pulgadas? Seguro que se te ponen los dientes largos cuando ves los nuevos modelos que van saliendo al mercado: cada vez más grandes y por supuesto, con más funcionalidades y mejor calidad de imagen.
Si hace unos cuantos años 42 pulgadas nos parecía que rozaba el límite, ahora el estándar estaría en los 46 pulgadas y para el año que viene la tendencia es de 55-65 pulgadas. Y en cuanto a la tecnología, pasamos de los televisores de tubo a LCD, después los LED, años más tarde los smartTV y ahora llegan los UHD, o ultra alta definición o 4K.
La apuesta de Samsung es por pantallas grandes – de más de 46 pulgadas – y UHD, pues «cuanto mayor es la pantalla más puntos por pulgada se necesitan para contar con una gran calidad de imagen. Por encima de 55 pulgadas es necesaria la UHD para tener una imagen de calidad», indica Antonio Rull, Training Manager de AV de Samsung. Y como elemento diferencial, la pantalla curva, aunque no son los únicos fabricantes que lo hacen. Es una tendencia que ya vimos en el CES de este año. Todo ello lo encontramos en la serie HU 8500, disponibles en 55 y 65 pulgadas.
¿Por qué Samsung apuesta por los paneles curvos? ¿cuáles son sus beneficios respecto a uno plano? Estuvimos probado uno de estos nuevos televisores curvos y os contamos nuestras impresiones.
El diseño curvo de la pantalla proporciona un mayor campo de visión, puesto que genera una percepción de pantalla mayor a la plana. Además, es más inmersivo porque crea un efecto panorámico totalmente absorbente. Estos televisores curvos UHD de Samsung cuentan con un radio de curvatura de 4,2 metros, que además de potenciar las ventajas de la pantalla curva, se aproxima mejor a la distancia media de visionado. Esta curva permite una distancia de visión uniforme y equilibrada para proporcionar una experiencia más realista, con mejores ángulos de visión y un mayor contraste desde diferentes posiciones. Da igual dónde estés sentada, que podrás ver la imagen igual de bien. Esto es como en los cines clásicos donde la pantalla era curva: todos los espectadores tienen la posibilidad de disfrutar prácticamente por igual, sin preocuparse por la situación de su asiento.
Además la pantalla curva se adapta de manera natural al reconocimiento de visionado del ojo humano. Hay un menor esfuerzo del ojo ante la pantalla, mayor confort y menor distorsión visual: al ser curva la pantalla, cuesta menos enfocar a diferentes distancias.
Realmente la experiencia que tuvimos fue muy buena, impresionante sobre todo cuando visionamos un video 4K , con contenido destinado a mostrar todas las bondades del dispositivo.
Y en cuanto al tamaño, cada vez queremos teles más grandes aunque nuestros pisos no vayan a la par. Pero no hay inconveniente: resulta que la distancia para visionar un televisor UHD la distancia recomendada por la ITV (International Telecommunication Union) es la mitad que respecto a los paneles Full HD. Aún más: si para una tele de tubo de 29 pulgadas se recomiendan 3 metros, para una tele Full HD de 55 pulgadas lo ideal es contar con 2,8 metros mientras que para una UHD de 85 pulgadas, lo recomendable son 1,8 metros.
Realmente la experiencia de inmersión es muy buena, así como la calidad de la imagen. Y eso que para las pruebas nos pusieron la programación televisiva normal – el Sálvame para ser exactos- y un video rodado ad hoc para mostrar todas la bondades. Ya si lo que visionamos es una película, le sacaríamos mucho más partido.
Los nuevos modelos de la serie HU8500 de Samsung, que también pueden colgarse en la pared como los planos, están equipados con smart TV y procesador Quad Core Plus. Estos televisores tiene una gran potencia de escalado para que como ahora mismo no hay mucho contenido 4K también le saques partido, viendo el contenido televisivo habitual con una gran calidad. Hasta la última arruga de la famosa de turno, vas a ver.
Tienen modo multiscreen que divide la pantalla hasta en cuatro cuadrantes (como 4 televisores de 32 pulgadas Full HD) y poder hacer diferentes cosas como ver un programa, tener el navegador abierto, e incluso ver dos programa de TV, gracias a su doble sintonizador TDT.
La serie HU8500 tiene dos tamaños: 55 y 65 pulgadas disponibles a un precio de 2.999 y 4.499 euros respectivamente.
Ah, y una cosa importante: la curva no se puede modificar, no lo intentéis 😉