Perder el móvil o que te lo roben es una gran faena en cualquier circunstancia, pero si además no tienes activada la función de localización del teléfono, todavía más.
Tanto en Android como en iPhone hay opciones para rastrear un terminal a partir del GPS interno.
Para ello en un Android hay que ir a Ajustes, Administrador de dispositivos y luego activa el Gestionar el dispositivo de forma remota. Activa también la segunda casilla, Permitir bloqueo remoto y restablecer datos de fábrica. A partir de ahí, podrás incluso borrar los datos del terminal a distancia desde un ordenador u otro terminal con la app Android Device Manager.
En iPhone es un poco más automático. Como parte del sistema operativo viene Buscar mi iPhone, una app que te localiza el móvil, el iPad o cualquier Mac en un mapa a partir de la localización (y de nuevo hay que tenerla activada). Si alguien intenta 10 veces acceder al terminal sin éxito, él solito se bloquea y borra los datos.
También todos los antivirus para teléfonos móviles Android cuentan con una función de localización y bloqueo del terminal.
Y, por último, pero no por ello la peor, Prey. Es un programa antirrobo que se puede instalar en un móvil iPhone o Android, que rastrea el dispositivo y permite enviarle mensajes, que obviamente van dirigidos al ladrón o a la persona que lo haya encontrado. Y también permite robar la información en remoto.
Sus responsables sostienen que de ninguna manera ellos guardan más información del dispositivo que su localización, y que puedes incluso borrar las trazas del programa si no lo necesitas, hasta con mensajes de texto.
El servicio es gratuito y luego hay fórmulas de pago, dependiendo del número de ordenadores protegidos. Instalarlo en tres máquinas cuesta cinco dólares (no llega a cuatro euros) al mes.