«Inspirada en las emblemáticas cámaras de película de 35 mm de Nikon»: así es la nueva Nikon Df, con un diseño retro pero con la última tecnología. De hecho se trata de una cámara profesional de gama alta, orientada a los usuarios puristas y los aficionados al diseño.
«La idea para esta cámara fue desde el principio la fotografía pura. Se trata de una cámara que hace que el usuario quiera cogerla y salir a tomar fotos», comentó Dirk Jasper, Director del departamento de Productos profesionales de Nikon Europa. Claro que para eso te tienes que haber gastado primero los casi 3.000 euros que vale.
Con un sensor de 16 megapíxeles (como la Nikon D4) y un cuerpo sellado fabricado en aleación de magnesio, la Nikon Df pesa un poco más de 700 gramos. El cuerpo de esta réflex está disponible en negro clásico o en plata con motivos negros y la empuñadura texturizada.
El aire retro le viene tanto por el diseño y el acabado como por detalles como los diales mecánicos de control permiten ajustar la sensibilidad ISO, la compensación de exposición, el modo de exposición y el modo de disparo independientemente.
La cámara dispone de una palanca que permite acoplar directamente los antiguos objetivos NIKKOR sin necesidad de adaptador. En la parte trasera cuenta con una pantalla LCD de 3,2 pulgadas con una resolución de 920.000 puntos.
El lema de fotografía pura no es gratuito: la cámara no graba vídeo, algo totalemtene excepcional en los modelos de Nikon que vienen ofreciendo esta funcionalidad desde 2008. En cambio tiene modo HDR y la previsualización en pantalla.
Y si el diseño y la textura no le daban suficiente aire retro, la Df permite usar el disparador de rosca. También están disponibles estuches y correas de piel en marrón y negro. Esto le acaba de dar un aire vintage completo.