Un grupo de emprendedores del mundo de la informática, el diseño gráfico y la carpintería, con la pasión común de lo retro, ha decidido recuperar las máquinas recreativas arcade de los años ochenta. Con el nombre de Bricoarcade comercializarán esta máquinas destinadas a particulares, para que puedan disfrutar de ellas en sus casas, echándoles tantas horas como hicieron antaño.
La nostalgia por los videojuegose incluso consolas de otras épocas tiene más adeptos de lo que pueda parecer. N en vano se pueden encontrar diversos emuladores de juegos de recreativas o videoconsolas antiguas. Así el usuario nostálgico puede revivir, en parte, aquellas experiencias adolescentes (o casi infantiles). Pero sin el hardware real, la experiencia no es del todo completa.
La demanda viene por parte de usuarios de entre los 30 y los 50 años que “quieren volver a experimentar la sensación única de este tipo de máquinas que les permitían prácticamente estar dentro de juegos como Pacman, Tetris, Donkey Kong o Galaxian, algo imposible de conseguir con los ordenadores o consolas actuales”, comenta Fernando Rodríguez, responsable de la dirección y la estrategia de productos de Bricoarcade.
Cada comprador puede personalizar la máquina con un diseño propio o con personajes y motivos que le resulten emblemáticos o nostálgicos. La personalización se aplica a determinadas áreas: la marquesina o el panel de control de la máquina (los botones y mandos pueden ser de diferentes colores).
Bricoarcade ofrece dos tipos de máquinas con el diseño característico de las Bar Top: una que se apoya sobre una mesa y otra se acopla en un soporte inferior que aumenta su altura en 90 centímetros, dándole la misma apariencia que las máquinas arcade clásicas de bares o salas recreativas de la década de los ochenta. El mueble integra un monitor de 18,5”, sistema eléctrico y panel de control para uno o dos jugadores.
Los precios para los modelos estándar están entre los 350 euros para el básico de las maquinas Bar Top y los 850 euros del modelo completo con pie hasta el suelo, controles Arcade, sistema eléctrico y ordenador interno. De todas maneras los precios pueden variar ya que estas recreativas se pueden personalizar. Lo mejor es que consultes tu propio diseño de arcade. Y feliz regreso a los 80! 😉